Piedra, papel o... ¡ ¡ TIJERAS ! !

La historia es la de siempre. Grupo de música que no logra triunfar, hasta que encuentra un productor que les lanza al estrellato. La gran diferencia frente a otros, es el gran espectáculo que dan en cada una de sus actuaciones.
Enmarcados en la extravagancia, con pilares de los 70 y los 80, con influencias de los Elton John y David Bowie de sus primeros años, y fundamentados en la estética kitsch, sexy y glam, el grupo va despuntando, y según va siendo conocido, va ganando adeptos.
Son dos los vocalistas, Jake Shears y Ana Matronic, si bien el peso del grupo recae sobre todo en el primero, acompañados de Derek G y Del Marquis (Guitarristas), Babydaddy (Bajista y teclista) y Paddy Boom (Batería). Sobra decir, que estos son nombres ficticios, y que remarcan la actitud/función/estilismo/personaje de cada uno de los integrantes.
Su primer disco, de nombre homónimo, les catapulto a la fama, logrando el aplauso conjunto de la critica y el público, que no olvidemos que es el que compra los discos.
Este año han lanzado la nueva entrega de sus “canciones espectáculo”, con un nombre muy sugerente, que resume sus pretensiones y objetivos: “Ta-dah” (Se podría traducir como nuestro “Tachán”). Estamos hablando de música festiva, sin complejos, con letras sugerentes, y ambiguas.
Hace poco, los miembros del grupo han hecho unas declaraciones, admitiendo su homosexualidad 4 de los 5 integrantes, sin decir quien es el miembro hetero. Sin embargo, creo que todo eso sobraba, y que es puro marketing, pues no hay mas que escucharles y verles.
Su primer single, “Don´t feel like dancin´” es una declaración de intenciones, logrando convertir una canción de desamor en un tema disco que dan ganas de bailar desde las primeras notas del piano, que aporrea Sir Elton, co-autor de algunas de las canciones.


En el video se puede ver una actuación durante unos premios de la MTV del año pasado, interpretando su primer gran éxito “Take your mama out”, siguiendo la línea del video clip que acompañaba la canción. Creo que es una de las mejores puestas en escena que se ha hecho en este tipo de ceremonia. No puedo disimular que Jake me encante, y que me parezca asombroso como se mueve en el escenario, como se contonea, y como baila, metiéndose al público en el bolsillo desde las primeras notas.
Esperemos, sin embargo que, como suele suceder en este tipo de bandas, no se les suba el ego a la cabeza, y acaben destruyendo al grupo.